Buscar la luz

Parece ser que cuando te ponés detrás del visor de una cámara, se abre el obturador de tu alma... Y se cierran los prejuicios, los miedos y las vergüenzas.

Y te sentís poderosa. Sentís que tu interior queda al descubierto, tus sentimientos a flor de piel y tus ojos se preparan a ver el lado bonito de las cosas.

Parece ser que cuando tomás una cámara en tus manos te sentís responsable de guardar todos los recuerdos lo más fielmente que podés, documentar la vida, construir ese registro que dentro de muchos años te hará recordar cómo fueron tus momentos felices.

Parece ser que estar de este lado de la cámara te hace ver todo con "ojos de foto."... ojos transparentes y sensibles, que te hacer ver los detalles que antes pasaban inadvertidos, que te acercan al alma de los demás de una forma más humana.

Y empezás a entender la diferencia entre ver y mirar... Ver, ve cualquiera, pero mirar... Mirar es detenerse, involucrarse, registrar, tener en cuenta, asombrarse, buscar... buscar con tus ojos la maravillosa luz en cada cosa que se pose frente a tu cámara.

Una vez que empezás a mirar a través del visor, te puedo asegurar, que ya no ves la vida igual, empezás a descubrir el mundo, e inevitablemente, el mundo te descubre a vos.